Desde este martes, los taxis de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires verán un incremento del 50% en sus tarifas, dividido en dos etapas. La ficha, que actualmente tiene un valor de 35,10 pesos, subirá a 43,80 pesos, y el próximo mes alcanzará los 54,80 pesos.
La medida, aprobada en una audiencia el pasado 26 de septiembre, fue impulsada por el gobierno porteño y se aplicará de manera escalonada, con un 25% de aumento en este momento y otro 25% programado para noviembre. Esto significa que los pasajeros notarán un aumento significativo en el costo de sus viajes en taxi en el corto plazo.
Por otro lado, la bajada de bandera, equivalente a diez fichas, tendrá un costo de 430,80 pesos a partir de ahora, y subirá a 54,80 pesos a partir del próximo mes. Este incremento en la tarifa básica afectará directamente a los usuarios de taxis, quienes tendrán que ajustar sus presupuestos para hacer frente a este aumento en el costo del transporte en la ciudad.
Las autoridades de la Ciudad justificaron esta actualización tarifaria como una medida necesaria para garantizar la operación y el mantenimiento del servicio, así como para sostener los salarios de los trabajadores del sector. Argumentaron que el aumento se alinea con otros gastos del sector, como el mantenimiento y la reposición de autopartes, que están influenciados por factores como la fluctuación del precio en moneda extranjera y la escasez de productos importados en el mercado local.
La resolución que establece el aumento fue publicada en el Boletín Oficial de la Ciudad el pasado lunes, con la firma del jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, quien señaló que existía un retraso en las tarifas diurnas y nocturnas del servicio público de taxis.
Este año ya se habían aplicado dos incrementos previos en las tarifas de taxis, totalizando un 50%. El 11 de marzo, se implementó un aumento del 30%, al que posteriormente se sumó otro 20% desde el 5 de mayo. Así, la bajada de bandera pasó de 225 pesos a 293 pesos en marzo, y en mayo ascendió a 351 pesos. En aquel momento, el jefe de gobierno explicó que estos ajustes respondían a las demandas de los taxistas para no perder poder adquisitivo y al incremento en el costo del gas natural comprimido (GNC).
Este nuevo aumento de tarifas en el servicio de taxis se suma a otros aumentos en el costo de vida en la Ciudad de Buenos Aires, lo que representa un desafío económico adicional para los habitantes que dependen de este medio de transporte. Los usuarios y taxistas tendrán que adaptarse a esta nueva realidad financiera en los meses venideros.
Por Buen Ciudadano
