La línea 144 y el chat BOTI, ambos del GCBA reciben y contienen a mujeres víctimas de violencia de género. El BOTI tuvo 5000 consultas también.
Son exactamente 44.059 llamadas las que recibió la Línea 144 del GCBA. Este servicio para la comunidad está organizado por la Dirección General de la Mujer, perteneciente a Desarrollo Humano, un área ministerial de la Ciudad. La organización informó que en los CIM (Centros Integrales para la Mujer) la cifra de admisiones históricas superó 60.000.
Todo el año sin interrupción, 24 por 7, la línea 144 brinda contención y escucha a toda mujer que esté sufriendo violencia de género. Es importante contar con este importante recurso.
En el Ministerio de Desarrollo Humano, con figuras como María Migliore, a la cabeza, están concientizados de que es una problemática muy extendida y de que es tarea importantísima para el GCBA encontrar soluciones para ella. Es mucho el sufrimiento que le toca vivir a muchas mujeres. La red humana en estas ocasiones es crucial; contar con una mano amiga en un teléfono puede ser clave.
El WhatsApp del GCBA ha pasado a ser también una vía de ayuda también muy utilizada cuando se está en situaciones en que la mujer es observada por el agresor con quien convive. La opción del whatsap es ahí una herramienta silenciosa. En la pandemia eso se demostró, ya que las llamadas telefónicas se hacían más difíciles en ese contexto. Asombrosamente, fueron 5.000 los chats establecidos el año pasado por esa vía de comunicación.
Un adelanto que implementó el Gobierno de la Ciudad para este gran flagelo es muy sorprendente y es la inteligencia artificial. La voz de la mujer que llama es reconocida, se identifica el grado de riesgo para un manejo de la situación más veloz. El tiempo de respuesta se reduce y el audio con la voz grabado se transcribe a texto. Es muy efectivo para la resolución de casos.
El Centro integral para la Mujer es dirigido por Carolina Barone. Ella nos transmitió que la inteligencia artificial permitió que en base a un tono de voz y también a una base de datos, se pueda precisar rápidamente la identidad de quién llama. La posibilidad de impedir femicidios se reduce mucho. Dice Barone: en estas situaciones, “cada segundo que pasa cuenta”.
Cada comuna tiene un Centro Integral de la Mujer. Allí las víctimas de violencia de género son escuchadas y luego asesoradas. Ellas pueden informarse sobre sus derechos y aprender cómo encontrar una salida a su problemática. Se las asiste psicológicamente y también desde una óptica legal. Es record la cantidad de mujeres concurrentes.
Por Buen Ciudadano