El jefe de gobierno porteño, Jorge Macri, sostuvo una reunión este viernes con el monseñor Fernando Vérgez Alzaga, secretario general de la Gobernación del Vaticano, de cara a la ceremonia de beatificación del cardenal Eduardo Pironio en Luján, la cual será presidida por el religioso.*
En una destacada reunión que tuvo lugar este viernes, el jefe de gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Jorge Macri, se encontró con el monseñor Fernando Vérgez Alzaga, secretario general de la Gobernación del Estado Vaticano. Este encuentro adquiere una relevancia especial en la antesala de la ceremonia de beatificación del cardenal Eduardo Pironio, programada para este sábado en Luján, la cual será presidida por el mencionado representante del Vaticano.
Asimismo, participó en la reunión el nuncio apostólico en Argentina, monseñor Miroslaw Adamczyk, consolidando así un espacio de diálogo entre las autoridades eclesiásticas y el gobierno local.
En este contexto, Macri expresó la importancia de fortalecer los lazos entre la Ciudad de Buenos Aires y la Santa Sede, subrayando la relevancia de eventos como la beatificación de Pironio. “Es un honor recibir al monseñor Vérgez Alzaga y al nuncio apostólico Adamczyk en nuestra ciudad. Este encuentro refleja la estrecha relación entre la Iglesia y la gestión gubernamental”, destacó el jefe de Gobierno.
Por su parte, el secretario general del Vaticano, Vérgez Alzaga, resaltó la trascendencia de la ceremonia que liderará en Luján. “La beatificación del cardenal Eduardo Pironio es un hito significativo para la Iglesia y para la comunidad católica en Argentina. Celebrar este acontecimiento en conjunto con las autoridades locales demuestra la unidad en torno a valores fundamentales”, manifestó.
Eduardo Pironio, nacido en 1920 y fallecido en 1998, dejó un legado notable como obispo, consagrándose en 1964. Su dedicación a la promoción de la Jornada Mundial de la Juventud lo convirtió en una figura emblemática para la Iglesia. La aprobación, por parte del Papa Francisco, del milagro necesario para su beatificación el pasado 8 de noviembre, marcó un acontecimiento trascendental para la comunidad católica.
En este sentido, Macri agradeció la contribución de Pironio a la sociedad y destacó su impacto más allá de lo religioso. “El cardenal Eduardo Pironio dejó un legado imborrable. Su labor trasciende lo eclesiástico y ha dejado huella en la historia de nuestra nación. Esta beatificación es un reconocimiento merecido”, afirmó.
En la misma línea, el nuncio apostólico Adamczyk subrayó la importancia de mantener una conexión estrecha entre la Iglesia y las instituciones gubernamentales. “La colaboración entre la Santa Sede y las autoridades locales fortalece los valores que promueven el bien común y la solidaridad”, señaló.
La ceremonia de beatificación de Eduardo Pironio se erige como un acontecimiento significativo que trasciende lo religioso, consolidando la relación entre las instituciones eclesiásticas y el gobierno local. En tanto, la reunión entre Jorge Macri, monseñor Vérgez Alzaga y el nuncio apostólico Adamczyk sirvió como un espacio de diálogo fructífero, reafirmando el compromiso conjunto hacia valores que impactan en la sociedad en su conjunto.
Por Buen Ciudadano
